Una alimentación saludable no debe ir ligada del objetivo de bajar de peso, si bien es un medio por el cual se puede lograr este propósito, no debería ser la única razón. Una alimentación saludable es sumamente necesaria para mantener al organismo en buen estado. Con esto, el cuerpo se llena de vitalidad, de fuerza, energía e impide que nos enfermemos de forma constante. Nutrir el organismo es fundamental para su correcto funcionamiento. Esto no quiere decir que nunca más te des algún gusto respecto a la comida, sino se refiere más a que procures en su mayoría consumir alimentos balanceados para mejorar tu sistema.

Como sabemos que es difícil comenzar una vida saludable si no estás acostumbrado, te damos unos pequeños pasos para que comiences una dieta baja en grasas y harinas refinadas:

Alimentos de un solo ingrediente

Aunque no lo creas, consumir alimentos con más de un ingrediente puede ser perjudicial para la salud. La mayoría de los alimentos procesados tienen una amplia variedad de ingredientes entre los que se encuentran un sinfín de aditivos y otras sustancias que no son tan saludables. Además, el que tengan tantos componentes hace que su valor calórico aumente. Lo más recomendable es reemplazar estos alimentos por algunos de un solo ingrediente, esto hará que te sacies más fácilmente, y que tu metabolismo sea más rápido.

Reduce el consumo de harina refinada

La harina refinada esta oculta en muchos alimentos, desde los panes, hasta las pastas y las galletas que dicen ser saludables. Si te gustan demasiado estos productos y crees que eliminar su consumo es un tanto difícil, puedes optar por sustituirlos por harinas integrales o de avena, quinua y garbanzo. Con esto, reducirás el consumo de calorías y al ser los alimentos integrales altos en fibra, ayudarás a tu metabolismo.

Agrega proteína a tus alimentos

Las proteínas magras, como la leguminosa, la quinua, el huevo, son perfectos para ayudar a que tu metabolismo funcione correctamente. Además, ayudarán a fortalecer la masa muscular de tu cuerpo, lo que definirá más tus músculos.

Observa la tabla nutricional de los alimentos

Muchas veces, las grandes industrias de alimentos se agarran del marketing para promocionar sus productos y que la gente los compre. Es demasiado común que observes en muchos alimentos etiquetas que dicen bajo en grasas, fit, no contiene azúcar, bajo en sal, etc. sin embargo, si observas la tabla nutricional, son alimentos que aun así tienen hartos índices de grasa, azúcar y aditivos. Por esto, es necesario que aprendas a leer la información nutricional y no te dejes guiar por la promoción que tienen estos productos.

Consume la cantidad recomendada de agua

Aunque no te des cuenta, al tomar refrescos o jugos embotellados, estás ingiriendo un montón de calorías prácticamente vacías ya que no logran saciar tu cuerpo. Esto hace que sin estarnos alimentando realmente, el cuerpo reciba muchos azúcares que no necesita. Por esto, el consumo de agua es sumamente importante ya que no solo hidrata el cuerpo y le da un mejor aspecto al rostro y la piel, sino también hace que nuestro metabolismo se acelere.  

Agrega frutas y verduras a tus comidas

Tantos las verduras como las frutas son esenciales en nuestra dieta. De hecho, las frutas pueden ser ese toque dulce que necesitas o que vas a extrañar si vas a dejar los azúcares procesados. Además, el agregar estos alimentos a tu consumo diario de comidas hará que tu dieta sea variedad con la cantidad de nutrición necesaria para saciar el cuerpo en alimento y nutrientes.

Cómo pudiste ver, incorporar alimentos sanos a la dieta regular no es tan complicado ya que no te vas a privar de lo que consumes, sino simplemente consiste en hacer una pequeña variación en ciertos productos para tener una dieta más saludable, con más proteínas, más nutritiva y sin tanta grasa, azúcares y aditivos que a la larga pueden ser muy perjudiciales para nuestra salud.